El septum nasal se compone de una parte profunda, fija y rígida formada por los huesos maxilar, vómer y etmoides, y una parte parcialmente superficial y flexible que es el cartílago del septum nasal. La parte ósea apenas tiene papel, si acaso tiene alguno, en la forma nasal pero su alineamiento es de gran importancia funcional para le permeabilidad de la vía aérea; la parte cartilaginosa es casi irrelevante en lo que respecta a la función respiratoria pero es de enorme importancia como soporte de la longitud nasal y del alineamiento, rotación y longitud de la punta y de la suprapunta.
La nariz se compone de una parte fija y rígida que se denomina pirámide nasal, aunque más bien tiene forma de tienda de campaña o tejado, y otra parte móvil y flexible que es la punta nasal, las alas y sus anejos. La pirámide nasal está formada a su vez por dos tipos de estructuras o tejidos; en la parte más cefálica o superior la pirámide nasal está formada por los huesos nasales y la apófisis ascendente del maxilar, es decir, por tejido óseo; la parte más caudal o inferior de la pirámide nasal está formada por los cartílagos triangulares o también llamados cuadrangulares o laterales o laterales superiores, es decir, por tejido cartilaginoso.
Ambas mitades o paredes de la pirámide nasal se unen y fusionan horizontalmente entre sí en el centro de la nariz para formar el dorso, giba o caballete nasal (mal llamado por muchas personas como el tabique o septum, que no forma parte del dorso nasal), creando lo que se denomina pirámide o dorso óseo o duro (cefálico o superior), formado mediante sinostosis o fusión entre huesos, y la bóveda intermedia, pirámide o dorso cartilaginoso o blando (caudal o inferior), formado mediante sincondrosis o fusión entre cartílagos. A su vez, el dorso nasal se une y fusiona por su cara inferior o posterior con el tabique o septum nasal, septum nasal que también, a su vez, se compone de una parte ósea cefálica o superior y otra cartilaginosa caudal o inferior, correspondiendo el septum óseo a la fusión con el dorso cefálico o superior u óseo y el septum cartilaginoso a la fusión con el dorso caudal o inferior o cartilaginoso, formando así un trípode en el que las patas laterales son la pared nasal y la pata central el septum nasal.
Un septun desalineado en su parte profunda ósea probablemente producirá turbulencias respiratorias, difficultades u obstrucción franca, pero no deformidades nasales; un septum cartilaginoso desalineado es poco probable que empeore la función nasal pero sin duda alguna distorsionará la forma y posición de la punta nasal y sus anejos.
El septum nasal se trata mediante un grupo de maniobras quirúrgicas denominadas en general como septoplastia, intervención indicada por razones tanto estéticas como funcionales dependiendo de cada situación particular.